Hebreos 5:6-8
Hebreos 5:6-8 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Y en otro pasaje dice: «Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec». En los días de su vida mortal, Jesús ofreció oraciones y súplicas con fuerte clamor y lágrimas al que podía salvarlo de la muerte y fue escuchado por su temor reverente. Aunque era Hijo, mediante el sufrimiento aprendió a obedecer.
Hebreos 5:6-8 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
En otra parte de la Biblia también le dijo: «Tú eres sacerdote para siempre, como lo fue Melquisedec.» Cuando Cristo estuvo aquí en el mundo, oró mucho a Dios, y con lágrimas le rogó que lo librara de la muerte, pues Dios tenía poder para hacerlo. Y como Cristo siempre fue obediente, Dios contestó su oración. Aunque él era Hijo de Dios, por medio del sufrimiento aprendió lo que significa obedecer siempre a Dios.
Hebreos 5:6-8 Reina Valera Contemporánea (RVC)
y que en otro lugar también dice: «Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec». Cuando Cristo vivía en este mundo, con gran clamor y lágrimas ofreció ruegos y súplicas al que lo podía librar de la muerte, y fue escuchado por su temor reverente. Aunque era Hijo, aprendió a obedecer mediante el sufrimiento
Hebreos 5:6-8 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Y también le dijo en otra parte de las Escrituras: «Tú eres sacerdote para siempre, de la misma clase que Melquisedec.» Mientras Cristo estuvo viviendo aquí en el mundo, con voz fuerte y muchas lágrimas oró y suplicó a Dios, que tenía poder para librarlo de la muerte; y por su obediencia, Dios lo escuchó. Así que Cristo, a pesar de ser Hijo, sufriendo aprendió lo que es la obediencia
Hebreos 5:6-8 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Como también dice en otro lugar: Tú eres sacerdote para siempre, Según el orden de Melquisedec. Y Cristo, en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente. Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia
Hebreos 5:6-8 La Biblia de las Américas (LBLA)
como también dice en otro pasaje: Tú ERES SACERDOTE PARA SIEMPRE SEGúN EL ORDEN DE MELQUISEDEC. Cristo, en los días de su carne, habiendo ofrecido oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas al que podía librarle de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente; y aunque era Hijo, aprendió obediencia por lo que padeció
Hebreos 5:6-8 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Y en otro pasaje Dios le dijo: «Tú eres sacerdote para siempre, según el orden de Melquisedec». Mientras estuvo aquí en la tierra, Jesús ofreció oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas al que podía rescatarlo de la muerte. Y Dios oyó sus oraciones por la gran reverencia que Jesús le tenía. Aunque era Hijo de Dios, Jesús aprendió obediencia por las cosas que sufrió.